bioconstrucción

construir con tierra

“PEOPLE WILL DIE EARLY DEATHS AND WILL LIVE STUNTED LIVES BECAUSE OF UNSANITARY, UNECONOMIC AND UGLY HOUSING” (Hassan Fathy)

Muchos hogares actuales sufren el "sindrome del edificio enfermo", incluso en los países llamados "desarrollados". Los principales materiales "sofisticados”, actualmente empleados en la construcción, no solo nos pueden hacer enfermos (toxicidad, radiaciones, temperatura de contacto) pero también perjudican a nuestro entorno, tal en su extracción, elaboración y transporte, como en su reciclaje. También pueden tener consecuencias mediambientales desfavorables y producir altos costes en la calefaccion y refrigeración de edificios.

 

confección de bloques de tierra, Egipto

 

La sustitución de estos materiales por “tierra” puede sonar anticuada, ya que fueran de tierra cruda las construcciones más primitivas que remontan a nuestros orígenes. Por otro lado, la historia cuenta con ciudades enteras edificadas con tierra, como Shibam en Yemen, con edificios de hasta 30 m de altura, y es un material encontrado no solo en viviendas pero también en iglesias, mezquitas, palacios, castillos y murallas como la china.

 

Su empleo en edificaciones importantes no sorprende, si estudiamos las principales ventajas de la TIERRA CRUDA como material de construcción:

 

-       disponibilidad en todas las partes del mundo

-       casi todos los tipos de tierra son utilizables en alguna de las numerosas técnicas empleadas

-       material no toxico (si proviene de suelos no contaminados)

-       es totalmente reciclable, se reintegra en la naturaleza

-       económico y con pocos gastos energéticos y transporte en su extracción y tamizado

-       excelente inercia térmica, ventaja sobre todo en zonas aridos con alternaciones de calor y frio

-       excelentes propiedades acústicas

-       poroso y regulador de humedad ambiental, crea ambientes higiénicos y salubres

-       material mineral que no se pudre

-       excelente resistencia al fuego

-       muy versátil en sus aplicaciones (toda la envolvente, desde estructura hasta acabados nobles)

-       resistente a las cargas, especialmente a la compressión

-       alta plasticidad

 

Entre sus desventajas esta su fragilidad al agua, pero podemos mejorar sus cualidades con diversos conglomerantes y aditivos naturales de origen mineral o vegetal. Es técnicamente exigente ya que cada yacimiento es diferente y el material empleado debe tener una composición determinada y una puesta en obra adaptada, para poder aprovechar correctamente sus propiedades.

El siglo XX fue, salvo en tiempos de crisis o guerra, un duro revés para la construcción con tierra. Además del creciente empleo de hormigones y prefabricados de cemento, los ladrillos cocidos fueron los responsables de la decadencia. Los materiales industrializados y de alta resistencia mecanica, idoneos para una construcción más vertical, también se hicieron espacio en la construcción rural con la conscuente perdida de propiedades que no poseen (alta porosidad y permeabilidad, propiedades termodinamicas).

Con la consecuente pérdida de conocimiento, la tierra está prácticamente ignorada en la construcción actual, aunque todavia forma parte del paisaje cotidiano en algunas regiones urbanas y rurales en donde se conserva el patrimonio de tierra.

edificio de adobe de 3 plantas, Aragón (España)